Marivel Chávez Ochoa
Raciel tiene dificultades para amarrarse las agu-jetas y, una noche, tiene un sueño en el que sus cuatro pares de agujetas favoritas se burlan de él por no saberlas amarrar; pero decide hacer un trato con ellas para que dejen de inquietar sus sueños. En esta historia, conoceremos la vida de Raciel y las aventuras que pasa con sus agujetas que lo acompañan desde su niñez hasta su adultez. Siendo el niño fiel a la promesa que les hizo: cuidarlas, mantenerlas limpias y nunca tirarlas. 10