Andrés Gattinoni
Desde fines del siglo XVII, una idea inquietante circulaba en Gran Bretaña y algunos países vecinos: Inglaterra era la región del spleen. Esta forma de la melancolía parecía ser tan universal entre los habitantes de esa nación que en 1733, George Cheyne, un reconocido médico escocés, la bautizó el mal inglés. ¿Cuáles eran las causas de este trastorno y por qué, según otro observador contemporáneo, acosaba a la isla como un demonio? Entre las explicaciones ofrecidas en la época estaban las características geográficas y climáticas del país. Pero también y esto era lo más perturbador la epidemia parecía ser resultado de la modernidad inglesa: de su novedoso régimen político, su tolerancia religiosa y de las consecuencias sociales y morales de su transformación en una potencia colonial.¿Por qué la melancolía una palabra que nació en Grecia hace más de dos mil años tendría alguna relación con la modernidad? 'El mal moderno' explora las respuestas que los británicos del siglo XVIII dieron desde el punto de vista de la filosofía moral, la medicina y la teología. Además, presta especial atención al humor y la risa, pues no sólo a través de palabras serias y tristes se podía conocer la melancolía. 10